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Al dar la bendición "Urbi et Orbi", el Papa denunció los diez meses de guerra y alertó de la escasez de alimentos derivada del conflicto.

Sigamos a Jesús, que se despojó de su gloria para hacernos partícipes de su plenitud. Dejémonos conmover por el amor de Dios que se hace hombre para salvarnos. Belén nos muestra la sencillez de Dios, que se revela a quien tiene un corazón puro y abierto.

En su mensaje, el Papa dijo que estamos viviendo una grave carestía de paz: Ucrania, Siria, Israel, Palestina, Haití y Líbano, algunos escenarios “de esta ...

» Porque, mientras los animales en el establo consumen la comida, los hombres en el mundo, hambrientos de poder y de dinero, devoran de igual modo a sus vecinos, a sus hermanos» dijo Francisco que añadió: «¡Cuántas guerras! Pienso sobre todo en los niños devorados por las guerras, la pobreza y la injusticia», lamentó. Francisco pidió al Niño Jesús que ayude al Líbano, para que, con el apoyo de la comunidad internacional y con la fuerza de la fraternidad y la solidaridad pueda recuperarse. Palabras del Papa Francisco en el mensaje Urbi et Orbi de este 25 de diciembre, donde nos pide que, como los pastores de Belén, dejemos que nos envuelva la luz y vayamos a ver el signo que Dios nos ha dado. Desde que comenzó la guerra en Ucrania, poblaciones enteras en Afganistán y los países del Cuerno de África, están sufriendo la carestía. «No nos olvidemos hoy de tantos migrantes y refugiados que llaman a nuestra puerta en busca de consuelo, calor y alimento. Nos pide que como ellos, vayamos también nosotros sin demora y dejémonos maravillar por el acontecimiento impensable de Dios que se hace hombre para nuestra salvación. Imploremos al Señor para que allí, en la tierra que lo vio nacer, se retome el diálogo y la búsqueda de confianza recíproca entre israelíes y palestinos”. Vino a estar entre nosotros en el silencio y en la oscuridad de la noche, porque el Verbo de Dios no necesita reflectores ni el clamor de voces humanas. El Papa en su mensaje Urbi et Orbi recordó los conflictos que afectan a la humanidad y los países donde se muere de hambre. Al mencionar Ucrania, dijo que desde que comenzó allí la guerra muchos países especialmente en el Cuerno de África y Afganistán están en peligro de carestía. En su mensaje, el Papa dijo que estamos viviendo una grave carestía de paz: Ucrania, Siria, Israel, Palestina, Haití y Líbano, algunos escenarios “de esta tercera guerra mundial”.

Con motivo de la celebración de Navidad este 25 de diciembre, el Papa Francisco impartió la tradicional Bendición “Urbi et Orbi” (a la ciudad e Roma y al ...

Dejémonos conmover por el amor de Dios y sigamos a Jesús, que se despojó de su gloria para hacernos partícipes de su plenitud. Que oriente hacia una tregua duradera en Yemen y hacia la reconciliación en Myanmar y en Irán, para que cese todo derramamiento de sangre. Hermanos y hermanas, Belén nos muestra la sencillez de Dios, que no se revela a los sabios y a los doctos, sino a los pequeños, a quienes tienen el corazón puro y abierto (cf. Que el Niño Jesús sostenga a las comunidades cristianas que viven en todo el Oriente Medio, para que en cada uno de esos países se pueda vivir la belleza de la convivencia fraterna entre personas pertenecientes a diversos credos. Y en ese pequeño semblante inocente reconozcamos el de los niños que en cada rincón del mundo anhelan la paz. Que la luz de Cristo ilumine la región del Sahel, donde la convivencia pacífica entre pueblos y tradiciones se ve perturbada por enfrentamientos y violencia. Él, con su encarnación, pasión, muerte y resurrección, abrió el paso de un mundo cerrado, oprimido por las tinieblas de la enemistad y de la guerra, a un mundo abierto, libre para vivir en la fraternidad y en la paz. Imploremos al Señor para que allí, en la tierra que lo vio nacer, se retome el diálogo y la búsqueda de confianza recíproca entre israelíes y palestinos. Estas cargas imposibilitan ir a Belén, excluyen de la gracia de la Navidad y cierran el acceso al camino de la paz. Son las mismas pasiones negativas que impidieron que el rey Herodes y su corte reconocieran y acogieran el nacimiento de Jesús: el apego al poder y al dinero, la soberbia, la hipocresía, la mentira. Vino a estar entre nosotros en el silencio y en la oscuridad de la noche, porque el Verbo de Dios no necesita reflectores ni el clamor de voces humanas. Venzamos el letargo del sueño espiritual y las falsas imágenes de la fiesta que hacen olvidar quién es el homenajeado.

En la bendición Urbi et Orbi Francisco pidió redescubrir el sentido de la Navidad. Dijo que el significado de estas fiestas está “anestesiado por el ...

También habló de Irán, para pedir que se detenga el derramamiento de sangre. Dijo que el significado de estas fiestas está “anestesiado por el consumismo”. Francisco en la Urbi et Orbi pide por el fin de la “guerra insensata” de Ucrania y por Irán

Francisco pide que nuestra mirada se llene "de los rostros de los hermanos y hermanas ucranianos, que viven esta Navidad en la oscuridad"

Dejémonos conmover por el amor de Dios y sigamos a Jesús, que se despojó de su gloria para hacernos partícipes de su plenitud". Jesucristo es también "el camino de la paz"; "Él, con su encarnación, pasión, muerte y resurrección, abrió el paso de un mundo cerrado, oprimido por las tinieblas de la enemistad y de la guerra, a un mundo abierto, libre para vivir en la fraternidad y en la paz. Que nuestra mirada se llene de los rostros de los hermanos y hermanas ucranianos, que viven esta Navidad en la oscuridad, a la intemperie o lejos de sus hogares, a causa de la destrucción ocasionada por diez meses de guerra". Como los pastores de Belén, dejemos que nos envuelva la luz y vayamos a ver el signo que Dios nos ha dado. Volvamos a Belén, ha insistido Francisco, "donde resuena el primer vagido del Príncipe de la paz. "El Señor vino al mundo en una gruta y fue recostado en un pesebre para los animales, porque sus padres no pudieron encontrar un albergue, a pesar de que a María le había llegado ya la hora del parto.